La contaminación y la salud respiratoria

La salud del planeta está directamente relacionada con la salud

Un planeta sano nos proporciona nuestras necesidades más básicas

• Tierra fértil para la producción de alimentos
• Agua segura para beber
• Aire limpio para respirar

El calentamiento del planeta está degradando el sistema de soporte vital de nuestro planeta y amenaza nuestra capacidad de prosperar y sobrevivir.

El cambio climático está ocurriendo más rápido de lo que se pensaba y representa una crisis global urgente que requiere una respuesta audaz y unida.

Además, ha sido identificado como la amenaza para la salud más importante del siglo, pero también es la “mayor oportunidad para redefinir los determinantes sociales y ambientales de la salud”.

Todos los que trabajan en la salud y la atención deben prepararse para responder a los impactos de la crisis climática en la salud.

La crisis climática tiene un impacto importante en la salud

Las temperaturas globales están aumentando a un ritmo vertiginoso, impulsadas por la acumulación de gases de efecto invernadero en la atmósfera.

Estos gases, de los cuales el más conocido es el dióxido de carbono, son en gran medida el resultado de la quema de combustibles fósiles.

Por otro lado, las temperaturas continúan aumentando y se espera que excedan el umbral de 1,5 a 2 grados.

Esto provocará cambios sin precedentes en los sistemas climáticos, con impactos devastadores para la salud y el bienestar humano.

La ciencia es inequívoca; un aumento global de 1,5°C por encima del promedio preindustrial y la continua pérdida de biodiversidad amenazan con un daño catastrófico para la salud que será imposible de revertir.

Contaminación medioambiental y los efectos en el paciente con EPOC

La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es un problema de primera magnitud por su elevada prevalencia y morbimortalidad, suponiendo un alto coste socioeconómico.

El principal agente causal de esta enfermedad es el consumo de tabaco.

Aunque en la actualidad se reconocen otros factores de riesgo que pueden contribuir a su desarrollo y favorecer su progresión, como es el caso de la contaminación ambiental.

Uno de los principales mecanismos responsables de los efectos adversos de la polución sobre la salud respiratoria es el estrés oxidativo.

Otros efectos perjudiciales de la contaminación ambiental sobre las vías respiratorias incluyen la inflamación, hiperreactividad bronquial, la amplificación de las infecciones virales y la reducción del aclaramiento mucociliar.

Numerosos estudios han demostrado que la contaminación atmosférica juega un papel crucial en el desarrollo de las exacerbaciones que padecen los pacientes con EPOC.

La contaminación y el impacto en la salud respiratoria

Dr. Javier de Miguel Díez
Servicio de Neumología. 
Hospital Universitario Greogrio Marañón. Madrid

Así, en diversos metaanálisis y revisiones sistemáticas se ha puesto de manifiesto que existe una asociación entre la exposición a corto plazo a diversos contaminantes ambientales.

Además del riesgo de sufrir agudizaciones, ingresos hospitalarios y mortalidad por esta enfermedad.

Por otro lado, en un estudio reciente realizado en nuestro país en el que se analizaron más de 160.000 pacientes durante un periodo de 10 años.

El Doctor Dr. Javier de Miguel Díez, del Servicio de Neumología, en el Hospital Universitario Greogrio Marañón de Madrid, concluyó que la temperatura y los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2), monóxido de carbono (CO), ozono (O3) y material particulado (PM10), afectaban al desarrollo pulmonar.

Por otra parte, se asociaron de forma significativa con los ingresos hospitalarios por exacerbación de EPOC y con la mortalidad intrahospitalaria.

Evidencias científicas y médicas

Cada vez hay más evidencia que indica que la contaminación ambiental no solo empeora la enfermedad, sino que contribuye a reducir la función pulmonar en los individuos expuestos y aumenta la prevalencia de EPOC.

La contaminación atmosférica ejerce un impacto significativo sobre la maduración y el desarrollo pulmonar.

No obstante, se ha demostrado que las mejoras a largo plazo en la calidad del aire pueden traducirse en un efecto favorable sobre los parámetros de función pulmonar.

Esto refuerza la importancia de implementar estrategias destinadas a reducir la contaminación atmosférica, para preservar la salud pulmonar, prevenir el desarrollo de EPOC y evitar el empeoramiento de los pacientes que ya padecen esta enfermedad.

Centro Andaluz Alfa-1